Cultivo

Cultiva sativa en interior

El cultivo de cannabis sativa en interiores es una forma popular de obtener cosechas consistentes y de calidad durante todo el año, ya que permite mantener un control estricto sobre las condiciones de crecimiento de la cannabis.

Estas condiciones pueden ajustarse para satisfacer las necesidades específicas de cada variedad de cannabis, lo que aumenta la eficiencia y reduce los riesgos asociados con plagas y enfermedades.

Además, el cultivo de cannabis en interiores ofrece la posibilidad de cultivar variedades que pueden no ser adecuadas para el cultivo al aire libre, y también permite a los cultivadores experimentar con diversos métodos de cultivo y técnicas de entrenamiento de plantas para mejorar la producción y la calidad de sus cosechas.

En la publicación de hoy, discutiremos los factores clave que debes tener en cuenta para cultivar cannabis sativa en interiores, incluyendo la elección del lugar, la selección del sustrato, el control del clima, la iluminación adecuada y otros consejos útiles para ayudarte a maximizar tu cosecha.

El cultivo de variedades sativa

Las plantas de Cannabis sativa son más grandes que las índicas (debido a un mayor espaciamiento entre los nudos/ramas) y tienen etapas de floración más largas. Esto probablemente sea consecuencia de años de adaptación en territorios con veranos largos, cálidos y húmedos.

Se cree que la Cannabis sativa es originaria de Asia Central (aunque también se pueden encontrar variedades landrace en el continente americano), y que las índicas provienen de regiones más frías de la India y Oriente Medio. Las plantas de cannabis sativa también tienden a estirarse mucho antes de empezar a florecer.

Estas peculiares características pueden hacer que las sativas sean algo difíciles de cultivar en interior, donde a menudo hay poco espacio. Incluso los cultivadores con experiencia a veces se pueden ver sorprendidos por sativas especialmente altas y estilizadas, que llegan a la parte superior del cuarto o armario de cultivo.

El crecimiento apical de las sativas también puede hacer que la cola principal de una planta proyecte sombra sobre el resto de ramas y puntos de floración, lo que se traduce en una cosecha deficiente y consistente en una enorme cola y decenas de cogollos “popcorn”. Por ese motivo, los cultivadores han optado tradicionalmente por cultivar plantas sativas o híbridos sativa dominantes al aire libre, y plantas índicas o índica dominantes en interior.

¿Cómo cultivar variedades sativa en interior?

Cultivar sativas en interior puede suponer todo un reto. Pero con esta información, no deberías tener problemas para cultivar una excelente sativa en un cuarto o armario de cultivo.

Elige la variedad adecuada para evitar sorpresas desagradables

Nivel de habilidad: Principiante

Una de las mejores formas de simplificar un cultivo de sativas en interior es empezando con la variedad adecuada. Dedica tiempo a analizar tanto las limitaciones de tu espacio de cultivo (por ejemplo, la altura del armario) como tus habilidades como cultivador/a (es posible que los principiantes no se sientan preparados para experimentar con algunas de las técnicas que mencionamos más adelante), y elige una variedad.

 

Compensar la altura/estiramiento de la planta

Nivel de habilidad: Principiante

Cuando hayas elegido la variedad adecuada para tu cuarto de cultivo, lo siguiente que puedes hacer para controlar el vigoroso desarrollo de tus sativas es plantar las semillas/plántulas en macetas más pequeñas de lo normal. El tamaño exacto de los recipientes variará en función de la cantidad de espacio que tengas disponible y de cuántas plantas vayas a cultivar a la vez. Pero 5-7 litros es una buena aproximación. Además, si tienes un armario de cultivo estándar de 1m, te recomendamos cultivar una sola planta sativa cada vez.

La reducción de la etapa vegetativa de tus sativas también te ayudará a frenar su crecimiento. La mayoría de los cultivadores de interior dejan que sus plantas vegeten durante aproximadamente 4 semanas; sin embargo, con las sativas, es posible que prefieras que empiecen a florecer después de 2-3 semanas para controlar su estatura y estiramiento. Recuerda que algunas variedades sativa pueden llegar a duplicar su tamaño tras iniciar la fase de floración.

Condiciones óptimas en tu cuarto de cultivo

Nivel de habilidad: Intermedio

Cuando tus sativas estén plantadas y creciendo, deberás asegurarte de que las condiciones de tu cuarto/armario de cultivo sigan siendo las adecuadas para evitar tener problemas o acabar con una cosecha deficiente. Ten en cuenta que a las variedades sativa no les gustan los ambientes fríos, aunque son bastante tolerantes a la humedad (mucho más que las índicas).

También suelen ser un poco más sensibles al abono (no es raro que las plantas sativa sufran toxicidad por nitrógeno, incluso si se aplican dosis de fertilizantes estándar) y les encanta pasar largas horas bajo una luz muy intensa. Si mantienes estas condiciones en tu armario/cuarto de cultivo, tus sativas estarán súper contentas.

-Un apunte sobre la estructura de los cogollos sativa

Las variedades sativa producen unos cogollos naturalmente esponjosos y ligeros. Si alguna vez has cultivado o fumado una sativa pura, es posible que te haya sorprendido el aspecto de sus cogollos “foxtail” (cola de zorro o fenotrigo). Sin embargo, la mayoría de las sativas modernas suelen tener un poco de genética índica (que sus criadores utilizan para mejorar el tamaño y el peso de las flores). Si

tus sativas tienen un aspecto saludable pero producen cogollos esponjosos, es probable que se deba a su genética (no intentes engordarlos con potenciadores de la floración u otros fertilizantes). Para evitar este tipo de cogollos en el futuro, busca híbridos sativa dominantes con una estructura de cogollos más densa.

Aplica LST o HST para acabar con el dominio apical y controlar el estiramiento

Nivel de habilidad: Intermedio

La dominancia apical y el estiramiento son dos de los principales inconvenientes del cultivo de sativas en interior. Las quemaduras por luz pueden perjudicar y estresar a las plantas que son demasiado altas y que crecen muy cerca de las luces; mientras que las plantas que desarrollan una cola principal muy alargada pueden producir solamente cogollos popcorn ligeros y deformes, en sus ramas inferiores. Y aquí es donde el entrenamiento puede resultar muy útil. Trata de aplicar topping o FIM a tus sativas pronto y con frecuencia. Y si los combinas con LST, conseguirás que tus sativas desarrollen un mayor crecimiento horizontal en lugar de estirarse solo hacia arriba.

Usa lollipopping, defoliación e iluminación lateral para evitar los cogollos popcorn

Nivel de habilidad: Avanzado

El LST y el topping/fimming son unas técnicas excelentes para conseguir que las plantas sativas desarrollen un dosel más homogéneo. En cambio, el lollipopping y la defoliación pueden ayudar a que la planta dirija su limitada energía a las áreas que producirán los cogollos más grandes y potentes. Los cultivadores más avanzados podrían incluso experimentar con el main-lining, un tipo de cultivo que utiliza una combinación de LST, topping y lollipopping para concentrar la energía de la planta en unos pocos brotes principales, que con el tiempo se convertirán en colas enormes.

Por último, instalar luces laterales en el cuarto o armario de cultivo puede ayudarte a dirigir más luz a las ramas inferiores de una planta, e impedir que produzca cogollos endebles. Pero ten en cuenta que la iluminación lateral aumentará la cantidad de electricidad que consume tu cuarto/armario de cultivo.

Cuándo cosechar variedades sativas en interior: ¿Cuánto tardan las sativas en florecer?

Las variedades sativas son famosas por tener fases de floración largas. Esto podría estar relacionado con su origen geográfico: es muy probable que la mayoría de sativas procedan de zonas con veranos largos, mientras que las índicas son originarias de regiones frías donde los veranos no duran mucho. Las sativas modernas suelen tardan unas 10-11 semanas en florecer; aunque esta cifra es solo un dato aproximado y puede variar mucho entre una variedad y otra.

La Amnesia Mac Ganja, por ejemplo, es un híbrido 80% sativa, creado a partir de la Amnesia Haze y la GG4, que puede tardar hasta 11 semanas en completar su ciclo de floración. En cambio, la Green Crack Punch también es sativa dominante (60%) pero termina de florecer tras solo 8-9 semanas.

A veces, la fase de floración puede variar incluso entre los distintos fenotipos de una misma variedad (algo que podría deberse a la genética de cada planta individual o a las condiciones del cuarto/armario de cultivo). Por ejemplo, la intensidad de la luz puede influir mucho en el tiempo que tardan las plantas en florecer, y es posible que las que reciben más luz terminen de florecer antes que el resto.

Ventajas de cultivar sativas

Debido a los cuidados especiales que necesitan, podrías preguntarte si merece la pena cultivar sativas en interior. Lo cierto es que el cultivo de sativas puede ser muy gratificante por varias razones:

  • Las sativas suelen producir cosechas abundantes debido a su tamaño.
  • Las sativas suponen un reto para los cultivadores que quieren mejorar sus habilidades.
  • Hay gente que afirma que las variedades sativa tienden a producir más THC que las índicas, aunque con tantos híbridos disponibles, esto es cada vez más difícil de medir. Aun así, las sativas suelen tener unos perfiles cannabinoides y terpenoides distintos de las índicas, lo que hace que proporcionen una experiencia única.
  • ¡Es muy entretenido ver crecer plantas sativas! Gracias a su alta tolerancia al estrés, las sativas pueden ser una auténtica delicia para los cultivadores a los que les gusta experimentar con diferentes técnicas de entrenamiento.

En conclusión, el cultivo de cannabis sativa no es una tarea sencilla, pero con la debida preparación, práctica y paciencia, puede resultar en cosechas de alta calidad. Es importante investigar y educarse sobre las diversas etapas del crecimiento de la planta y los cuidados necesarios para cada una. Con práctica y atención, puedes llevar a cabo con éxito un cultivo de sativa.